MI EXPERIENCIA COLIVING CON INÈDIT BARCELONA POR EMMA GIL
Mi experiencia con Inèdit Barcelona ha sido espectacular, y lo sigue siendo…
Para empezar, el decidir cambiarme de mi ciudad natal a Barcelona fue cuestión de menos de dos días, sabía que iba a ir a Barcelona, pero no sabía dónde vivir y con quién iba a vivir, sobre todo tenía la incertidumbre de la situación actual en la que vivimos por esta pandemia. Pero al ser septiembre un mes de cambios, me tocaba elegir bien y hacerlo con precisión.
Fue en cuestión de medio día cuando ya tenía todo resuelto al siguiente día.
Estuve buscando agencias que me pudieran ayudar a buscar una habitación en un piso de estudiantes, que tuvieran más o menos mi edad, 23 años, o que trabajaran pero que tuvieran ganas de vivir experiencias genuinas.
Aquí es donde actúa Inèdit Barcelona, con los que contacté por email para que me mandaran fotos de las habitaciones, cuántas personas vivían en la casa y su ubicación. En cuestión de unas horas, yo ya sabía cuál iba a ser mi habitación y con las distintas nacionalidades que iba a convivir. Estaba entusiasmada, esperando el momento de llegar a Barcelona ya que era mi primera vez allí, pero lo que no sabía es de la increíble experiencia que me esperaría al llegar.
Una vez llegué a Barcelona, fui directamente a la oficina de Inèdit para hacer el check-in y firmar toda la documentación. El trato fue 10 y la ubicación para encontrarlo muy buena. Tras la firma de documentación y ya con las llaves en la mano me encaminé hacia mi nuevo hogar en Barcelona a ver dónde iba a vivir.
A día de hoy, puedo decir que el apartamento es increíble, vivo a 10 minutos de pleno centro, en un piso amplio, con muebles nuevos, con una vista que no tiene precio, limpio y sobre todo mi habitación, que es de las mejores que he tenido desde hace 4 años que estoy fuera de mi casa. En mi caso, elegí la opción de habitación compartida y tengo la suerte de compartirla con Ilaria, una chica italiana con la que, en los primeros minutos hablando, ya éramos íntimas amigas. La habitación parece de anuncio, pero es tan real como las fotos que podréis observar debajo de este texto. También conocí a Ivonne nada más llegar, una chica que, de primeras, me hizo sentir comodísima enseñándome la casa entera, ya que es una de las veteranas en la casa.
Días después conocí a la pequeña mallorquina, Julia y a partir de ahí, las 4 unidas, experimentamos al máximo la experiencia del Coliving: cenas en casa, lugares por conocer, restaurantes peruanos, japoneses baratos y ricos, compras, miradores diferentes contemplando atardeceres, las luces de Barcelona por las noches y el castillo de Tibidabo cuando está encendido, risas y mil risas que hicieron una conexión tremenda entre nosotras.
Días después por la mañana, conocí a Alyce, una chica australiana que me dio buenísimas vibraciones. Ella se une a nosotras siempre que puede, ya que trabaja bastante, pero el tiempo que tiene, lo invierte para disfrutar con nosotras de Barcelona.
Algunas semanas después, conocimos a los nuevos roomies, un chico francés llamado Arnaud y Samira de Azerbaiyán, quienes nos enseñan sus bailes franceses, su música y las comidas más típicas de sus países.
Poco después vino Stephanie, de Suiza, una chica entusiasta y con ganas de comerse Barcelona poquito a poco. Con ella siguieron los planes de playa, chiringuitos, cervezas, noches intentando encontrar una terracita para tomar vinos.
Entre todos mis amigos de la universidad y mis roomies, se generó un vínculo genial entre nosotros, tenemos muchas para compartir y muchas cosas en común, aunque seamos de personalidades diferentes, por eso nos complementamos.
En resumen, la decisión tomada desde la otra punta de España no pudo ser mejor y estoy muy cómoda y feliz.
Vivo cada día mis pasos en Barcelona, dejando de lado el móvil por muchos ratos, disfrutando de la compañía que tengo a mi lado, unido a que en Barcelona aparece un sitio nuevo cada día y que te falta tiempo para descubrirlos todos. Todo esto fue clave para poder escribir este texto tan increíblemente feliz y con mi sonrisa en la cara.
En Barcelona siempre hay algo que hacer, siempre hay planes escondidos para encontrarlos y catalanes por conocer. Os animo a dar un paso más y que vengáis a conocer Barcelona y a todos los que vivimos en ella 😊
Ponte en contacto con Inèdit Barcelona, y por lo demás no te preocupes. Tanto ellos como nosotros y tus roomies nos encargaremos de que no te aburras ni un momento.
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